EL TALENTO COMO CLAVE PARA LA IGUALDAD DE GÉNERO EN LAS EMPRESAS
Marzo 08, 2023 | Cargo Transport
Siendo hoy, 08 de marzo, son muchas las empresas que nos sumamos a los mensajes institucionales que conmemoran esta fecha de gran importancia para las mujeres dentro y fuera del Perú.
Es claro que, en los últimos años, estos gestos han estado orientados a valorar y dar la importancia debida al trabajo y rol de las mujeres en nuestra sociedad; así como, en los distintos sectores económicos de nuestro país. Sin embargo, como empresarios ¿Estamos realmente comprometidos con construir empresas con igualdad de oportunidades, sin hacer ningún tipo de distinción de género? ¿Qué implica “estar realmente comprometidos” con ello?
Desde la posición de Cargo Transport, nos hemos comprometido con ser una empresa con un interés genuino por promover la igualdad de género. Esto, puesto que consideramos es una acción coherente con nuestra cultura de trabajo de “hacer lo correcto”. Entendiendo que ello significa un esfuerzo conjunto de la alta dirección, gerencias, jefaturas, operarios, conductores y personal administrativo para sacar adelante las iniciativas que, como empresa, desarrollamos con la intención de reducir las brechas de género que aún existen en nuestra sociedad.
Reflejo de ello es que, en el 2022, Cargo Transport sumó a sus éxitos, convertirse en la primera empresa del sector logístico en el Perú en implementar las cinco esferas del MIG Score, de la Organización Internacional del Trabajo, en todas sus áreas. Logro que es resultado de ser firmes en nuestra decisión de invertir para convertirnos en una empresa que abre las puertas a mujeres y hombres talentosos, capaces de sumar a nuestras operaciones; más el compromiso de cada uno de nuestros colaboradores para ser principales portavoces de muchas de las acciones que forman parte del proyecto de sostenibilidad de nuestra empresa para promover la igualdad de género.
Si bien creemos que este es el camino correcto para Cargo Transport; ante la conmemoración del Día de la Mujer reflexionamos acerca de si las buenas intenciones y nuestro más entusiasta esfuerzo es suficiente para que el proyecto de igualdad de género que promovemos sea sostenible en el tiempo.
Todo empresario sabe que tras un proyecto o iniciativa existe una inversión de recursos, tanto económicos como de tiempo y humano. Es así como para hacer que nuestras inversiones sean rentables, trabajamos para generar un producto o servicio que genere los réditos suficientes. Incluir en la ecuación el elemento “igualdad de género” no es la excepción. Desde las capacitaciones hasta la implementación de espacios adaptados para las necesidades específicas de mujeres representan un costo que alguien debe asumir.
La igualdad de género no es un tema que deba ser romantizado y solo quedar en “compromisos” de palabra o mensajes conmovedores; sino, debe ir de la mano de una intención real de invertir recursos para que se logre el objetivo. De igual manera, es necesaria una disposición honesta de los altos directivos de cada uno de los stakeholders, que intervienen en una actividad económica, para valorar los esfuerzos de sus pares y la inversión que estos realizan; así como, para hacer sus propias inversiones para materializar los compromisos de los que suelen hablar cuando se les pregunta acerca de las acciones realizadas en pro de la igualdad de género.
Quizá para ver convertirse en realidad la reflexión mencionada es necesario formatear nuestro chip empresarial tradicional y pensar que no estamos invirtiendo en mujeres que exigen condiciones particulares; sino, en personal talentoso capaz de hacer tan bien como cualquier otro el trabajo que se les encargue, que aportan valor con su esfuerzo y capacidades a nuestras operaciones, que son trabajadoras con la misma capacidad de dar solución a los retos diarios de nuestras actividades. Quizá solo necesitamos recordar que hacer esto, sería #HacerLoCorrecto.